Copa Catalana Internacional Banyoles

El fin de semana del 10 de marzo tocaba desplazarse a la mítica población de Bañoles, a correr la primera carrera del año, inaugurando así la temporada 2013. A esta carrera le tenía ganas, ya que es un circuito que me gusta, seguramente porque lo encuentro divertido, ya que tiene muchas curvas y esto te hace estar en concentración durante toda la carrera.

Llegué allí el viernes donde pude rodar un poco el circuito, y el sábado también lo rodé un poco, se podía ver que cada vez el terreno estaba más seco de las lluvias que habían caido durante la semana, se podía prever que se correría prácticamente en seco.

La salida se hizo a las 10:45h, una muy buena hora para correr, la salida la hice muy bien, colocándome en segunda posición para poder controlar el pelotón. Yo me puse delante esperando a los franceses, que sabía que no tardarían en llegar a la cabeza, así fue, llegaron y el ritmo empezó a ser más alto. Entré en el primer tramo estrecho en tercera posición, y cuando llevábamos el primer tramo, al corredor que iba segundo se le salió la cadena, el primero y yo nos estábamos escapando. Al empezar el tramo de la "V" como iba bien, no se me ocurre otra cosa que atacar, me salió bien, ya que lo dejé atrás. Empieza la bajada, iba con los nervios de escaparme, y cuando estaba ya casi acabando la trialera me encuentro a una doblada, le pedí pasó, pero izó el gesto de apartarse, pero no se aparto y nos caímos. Aquí empezaron un poco los problemas, ya que se me había doblado el manillar, como quedaba poco para la segunda área técnica, fui para allí, y un espectador me ayudo, perdí bastante, sobretodo en posiciones, ahora me tocaba remontar si quería hacer algo.

En la segunda vuelta empezé bastante atrás, sobre la posición 7. Esta vuelta fue la que más me costo, ya que tuve que recuperar todo el esfuerzo de la primera vuelta, pude recuperar alguna posición, pero no muchas.

La tercera vuelta me empezé a encontrar mejor, y yo no sabía en que posición iba en la carrera, estaba desorientado, pero un espectador me dice que delante tenia el tercero, cuarto, y sin estresarme empezé a coger ritmo, y poco a poco los tenía más cerca. Cuando consigó contactar con ellos veo que són tres, el que ocupaba la segunda posición había desfallecido y lo tenía allí. El grupo éramos 4 y luchábamos por la segunda posición. Así pasamos por meta.

La cuarta vuelta fue diferente, en el primer tramo de asfalto empezé a pensar con la cabeza, los dos franceses iban muy tocados, y quedaba uno que sabia que me aguantaría, pero pensando en la general de la Copa Catalana me iba muy bien para meter gente de por medio, pensé que seria mejor asegurar un tercer puesto que intentar luchar por un segundo y poder quedar quinto, total, que ataqué en la subida de asfalto. Como había previsto los dos franceses se habían quedado, quedaba el del Wild Wolf, yo sabia que el lucharía por la segunda plaza y se puso a rueda durante toda la vuelta, pero yo tiraba ya que para la general me iba bien. Al final de la vuelta, ya con el cansancio, el me atacó y me sacó unos metros para ganarme.

Al final tercero, un buen resultado sobretodo pensando en la general de la Copa Catalana, también me quedé con la buenas sensaciones durante la carrera, haciendo la mejor vuelta la última.

Aguilar de Segarra

El día 3 de marzo, el día de mi cumple, tocaba desplazarse hacía Aguilar de Segarra, donde disputaría la última carrera preparatoria de esta pretemporada 2013. La carrera se planteaba muy dura, con 56 km y unos 2000m de desnivel positivo, calculando estos datos, se presentaba dura, pero todo y eso tenia ganas de empezar porque las sensaciones últimamente eran buenas.

Como yo no podia correr en carrera de competición, salía desde el final de la parrilla como popular, por eso los primeros quilómetros me toco remontar posiciones para no encontrarme tapones en los senderos. Estos adelantamientos acabaron con un pequeño desfallecimiento hacía los kms 20-25. Me costo mucho aguantar este gran esfuerzo, pero al ver este pequeño desfallecimiento me tome rápido un "chupetín" de Isostar y me recuperé rápidamente, empezé a encontrarme mucho mejor hacía el km 30, donde empezé a recuperar posiciones con bastante facilidad.

Cuando empezaba a encontrarme mejor, y conseguir coger un ritmo en el cual iba cómodo y con un ritmo bueno, empezé a notar un dolor de espalda, ya lo encontraba algo normal, ya que la carrera tenía muchos tramos de subidas fuertes en el cual de trabajaba mucho de riñones. Pero sobre el km 40, en una bajada, un corredor de delante mío se bajo de la bici, entonces yo me vi obligado a bajarme, a la hora de subirme, cuando estaba levantando la pierna para subirme, noté un fuerte dolor en la espalda y me quedé clavado, sin poder moverme. Conseguí bajarme de la bici y acabar la bajada andando para ver si se me pasaba el dolor, pero ese dolor iba en aumento. Me tuve que sentar y intentar relajar ese dolor, pero no se iba. Me costó mucho tomar la decisión de retirarme, porque la idea de retirarse es como rendirse, y eso va en contra de mi. He aguantado muchos dolores, como en el Camp. de España cuando me rompí el dedo en una caída pero la conseguí acabar aún y el dolor que tenía, pero este dolor de espalda me estaba superando, no me dejaba subirme a la bici, ni andar... nada. Después de tomar de retirarme de la prueba, miré el móvil para llamar a que me vinieran a buscar, porque no podía moverme, cojo el móvil para llamar, y me llevé una decepción cuando vi que no tenía cobertura, no tenía ni idea de donde estaba, y ningún corredor que pasaba tampoco. Con todo el dolor que tenía me vi obligado a andar, cayéndome lágrimas de dolor que sentía por cada paso que hacía, un sufrimiento demasiado grande, buscando un punto donde hubiese cobertura. Al fin encuentro cobertura, pero donde estoy?? pues no lo se! ni idea, la única solución era continuar andando hasta encontrar un punto de control. Después de algo más de 40min andando consigo llegar a un habituallamiento. Una persona muy amable me llevó hasta Aguilar, donde se acabó mi aventura, que a nadie se la recomiendo. Me tuvieron que pinchar un calmante para relajar el dolor, pero no se iba.

A la tarde al ver que la espalda estaba dura y con un músculo un poco sobresalido, me fuí al hospital. El doctor se quedó un poco parado al ver esta "contractura de caballo", otra vez me volvieron a pinchar un relajante muscular. Y funcionó algo ya que bajo un poco la inflamación, pero aún no era capaz de mover la espalda.

Todo y que parece una aventura de Ciencia-Ficción, fue real, y la verdad que en algún momento empezé a perder los nervios, pero menos mal que acabó bastante bien.

Hoy lunes, iré al fisió para que me pueda relajar esta musculatura y poder entrenar normal, pero eso si, a Banyoles llegaré al 100%.

La verdad que no ha sido el día de mi cumple tal y como esperaba, pero esto demuestra que a veces las cosas no salen como uno espera, sino como tienen que pasar.